El Poblado de la Hoya, uno de los yacimientos más importantes de Euskadi, muestra los modos de vida y organización de las gentes que poblaron el lugar entre el 1200 a. C. y el 250 a. C.
La visita permite apreciar el urbanismo del antiguo pueblo, con calles, plazas y manzanas de casa, y profundizar en la materia a través de la exposición del centro de interpretación contiguo. El primer asentamiento en el lugar data del siglo XV a. C., cuando pobladores indoeuropeos llegados de Europa Central tomaron contacto con las culturas megalíticas existentes en la zona.
El poblado se defendía ya en esa época con una muralla, primero de madera y después de mampostería, de la que se conservan unos 370 metros.